15 de Noviembre de 989

Posted by Melissa D'Aubigne in

Éled, Alberia.

Qué cansancio. Apenas tengo tiempo para descansar, así que para comentar lo que ocurre menos aun. Shou Jin Lao parece que ha estado todo el tiempo que no he estado con él maquinando las nuevas formas de tortura a las que me iba a someter durante los entrenamientos, porque es imposible resistir todo lo que hacemos diariamente sin descansar al menos un par de veces. Parece ser que el entrenamiento que seguíamos en Jan Shu es demasiado “flojo”, según comentó el primer día, así que ha decidido endurecerlo cada día más, para “curtirme bien” y esas cosas.

Si hoy estoy aquí escribiendo esto es porque ha decidido acortar ligeramente el entrenamiento de hoy. Porque es un “día especial”. Pensaba que no se acordaría, pero lo ha hecho. Hoy es mi cumpleaños, hace 18 años que llegué al mundo. Pero a pesar de que se supone que es un día de celebraciones y alegría, yo no me siento alegre. Bueno, relativamente, claro... Alegre estoy, porque mis compañeros me han felicitado, aunque Heruan y Axel han sido los únicos en hacerlo antes de que yo dijese nada de que era mi cumpleaños. Probablemente escuchasen esta mañana a Shou Jin Lao felicitarme. A pesar de que estoy tranquila, en un lugar precioso (porque el bosque donde Éled está es bellísimo), me siento ligeramente vacía. Les echo de menos, a los tres, si, lo admito, incluso a mi padre. Es uno de esos días en los que a pesar de estar bien te apetece un abrazo, y parece que Heruan lo ha notado, porque cuando hemos salido a dar un paseo por el bosque circundante me lo ha dado. Llevo ya un tiempo dándole vueltas al asunto, y el caso es que no sé qué me pasa con él, pero me agrada muchísimo. Cada vez que me abraza me da la sensación de estar tranquila, de que por unos cuantos minutos he encontrado la paz.

Pero esta tarde estaba un poco raro, Heruan, digo. No sé, cuando me ha abrazado parecía nervioso, incluso podía verlo en sus ojos mientras estábamos hablando. Además, me ha llamado mucho la atención cuando se ha sonrojado. Si, sonrojado, incluso con la piel morena que tiene he podido ver sus mejillas ligeramente más rojas de lo normal. Y cuando estaba así se ha puesto aun más nervioso y se le han atragantado las palabras que iba a decirme. Cuando ya parecía que estaba sereno y había ordenado todos sus pensamientos, Shou Jin Lao ha interrumpido nuestra conversación, pidiéndome que le acompañase. Me he disculpado con Heruan y le he seguido. Cuando estábamos ya de nuevo en Éled me ha dado una carta, e inmediatamente he reconocido esas letras pequeñas y tímidas escritas en el papel. Mi familia me felicita en mi 18 cumpleaños. Se disculpan por no poder estar conmigo, pero... aun asi, ya me siento completa.

Gracias...

This entry was posted on martes, 17 de marzo de 2009 at 7:13 and is filed under . You can follow any responses to this entry through the comments feed .

0 comentarios

Publicar un comentario